POR QUÉ LOS PISOS QUE HAN SIDO OKUPADOS TIENEN ALTOS ÍNDICES DE VOLVER A SER OKUPADOS
En el mercado inmobiliario actual, la okupación de viviendas es un problema que genera preocupación tanto para propietarios como para inversionistas. Una vez que un piso ha sido okupado, las probabilidades de que vuelva a serlo son considerablemente altas. Este fenómeno no solo afecta el valor de la propiedad, sino que también plantea desafíos significativos para su administración y seguridad. En este artículo, exploraremos las razones detrás de este ciclo recurrente y ofreceremos estrategias para prevenirlo.
Factores que contribuyen a la reokupación de viviendas
1. Vulnerabilidad inicial: Las propiedades que han sido okupadas previamente suelen ser percibidas como vulnerables. Los okupas conocen las debilidades de la seguridad de estos inmuebles y pueden volver a explotarlas una vez que la propiedad es desocupada nuevamente.
2. Reputación en la comunidad okupa: Una vez que una propiedad ha sido okupada, puede ganar notoriedad dentro de la comunidad okupa. La información sobre su vulnerabilidad se comparte, convirtiéndola en un objetivo preferido.
3. Procesos legales largos y costosos: Los propietarios a menudo enfrentan largos y costosos procesos legales para desalojar a los okupas. Este desgaste puede llevar a una falta de diligencia en la protección de la propiedad una vez recuperada.
4. Ubicación y condiciones socieconómicas: Las áreas con altos índices de pobreza y falta de vivienda asequible son más propensas a la reokupación. Las propiedades en estas zonas enfrentan un mayor riesgo debido a la demanda constante de vivienda.
5. Efecto llamada: en ocasiones se van unos y vienen otros. Hay casos que un propietario paga al okupa por irse, este se va pero avisa a otros que el propietario paga creando un efecto llamada.
Estrategias para prevenir la reokupación
1. Mejorar la seguridad física: Después de recuperar una propiedad, es crucial mejorar las medidas de seguridad. Esto puede incluir la instalación de puertas y ventanas reforzadas, sistemas de alarma y cámaras de vigilancia.
2. Contratar Seguro contra Okupas: No solo ayuda a cubrir los costos legales y de desalojo, sino que también proporciona un análisis previo de la situación de la propiedad, identificando vulnerabilidades y ofreciendo soluciones para prevenir futuros problemas.
3. Presencia y mantenimiento continuo: Una propiedad que parece bien cuidada y frecuentada regularmente es menos atractiva para los okupas. Contratar a un administrador de propiedades o realizar visitas frecuentes puede disuadir intentos de reokupación.
4. Colaboración con la comunidad: Trabajar con las autoridades locales y la comunidad puede ser eficaz para prevenir la okupación. Participar en asociaciones vecinales y programas de vigilancia puede aumentar la seguridad y la conciencia comunitaria sobre el problema.
5. Utilización de la propiedad: Mantener la propiedad en uso, ya sea a través de alquileres temporales, comerciales o residenciales, reduce significativamente el riesgo de reokupación. Una propiedad habitada es menos susceptible a ser okupada nuevamente.
Conclusión
Los pisos que han sido okupados tienen un alto riesgo de volver a serlo debido a su vulnerabilidad percibida y a la información compartida entre las comunidades de okupas. Sin embargo, mediante la implementación de medidas de seguridad mejoradas, la contratación de Seguro contra Okupas y la colaboración con la comunidad, los propietarios pueden reducir significativamente este riesgo. La clave está en la proactividad y en la adopción de estrategias preventivas que aseguren la protección continua de la propiedad. Invertir en la seguridad y el mantenimiento no solo protege la inversión, sino que también ayuda a mantener el valor y la integridad de la propiedad a largo plazo.